Cumplieron su sueño de participar en La Voz Argentina, el éxito televisivo conducido por Marley que se emite por Telefe, donde interpretaron “Procuro olvidarte”, una canción que Ricardo Montaner alguna vez reversionó. En su estreno, no solo superaron la audición a ciegas sino que se consagraron como el primer dúo en ser elegido en la tercera temporada del reality, sumándose al equipo comandado por “La Sole”.
Por Ana Clara Spinelli.
Gonzalo Boelaert y Agustín Vargetto son oriundos de La Vanguardia y Coronel Bogado respectivamente, dos pueblos vecinos situados en el sur de Santa Fe que se encuentran separados solamente por 8 kilómetros. El primero de ellos trabaja en una empresa ubicada en Alvear que se dedica a la producción y comercialización de acoplados, remolques e implementos, mientras que el segundo es profesor de guitarra y canto.
Los inicios del dúo se remontan al 2009, año en que empezaron a ensayar y a cantar para luego concretar su primera presentación en vivo en el distrito que lo vio nacer a Gonzalo.
Boelaert, con quien bromeó el jurado por su parecido con el conductor del ciclo, dialogó en exclusiva con El Medio Mundo donde hizo un repaso de la carrera musical que comparte con su gran amigo y colega Agustín. Habló de los comienzos, las presentaciones, los castings, cómo afectó su actividad la pandemia de Covid-19 y mucho más. Leé la entrevista completa.
– ¿Cuáles fueron tus inicios y cuándo se conformó el dúo?
– Me inicié en el camino de la música allá por 2007 y, dos años más tarde, formamos el dúo. Al principio nos juntábamos a ensayar y a cantar, pero no en vivo. Luego hicimos una presentación en La Vanguardia, donde yo interpreté una canción de Alejandro Lerner y Agustín tocó la guitarra. Esa fue nuestra primera vez juntos arriba de un escenario. A partir de ahí comenzamos a trabajar y en 2012 grabamos “Momentos”, el primer CD con 12 covers. Y después vinieron las presentaciones en bares, restaurantes, ferias, carnavales y diferentes eventos de la zona. Incluso fuimos soporte de Abel Pintos en Zavalla, de Jorge Rojas en Fighiera, del Chaqueño Palavecino en Theobald y de tantos otros grandes artistas nacionales.
– ¿Cómo surgió la idea de presentarse en el casting de La Voz?
-Nos presentamos inicialmente en el casting de 2018, donde pasamos la prueba de cámara en Rosario pero no así en Buenos Aires. Entonces, de porfiados, volvimos al año siguiente. Ahí también pasamos la prueba de cámara y luego nos llamaron para confirmarnos que habíamos quedado en el programa. Realmente fue una gran alegría. Pero al tiempo nos avisaron que tenían que suspenderlo hasta nuevo aviso, por lo tanto el 2020 con la llegada de la pandemia se pasó por completo sin hacer nada. Así que estuvimos un año manteniendo el secreto, sin poder compartir la noticia, sabían los familiares nada más, hasta que en enero de este año nos volvieron a llamar para preguntarnos si estábamos decididos a ir. En ese instante, con Agustín cazamos el bolso y arrancamos para Buenos Aires. Ahí empezó nuestro sueño.
– ¿Por qué motivo eligieron a Soledad Pastorutti por sobre el dúo compuesto por los hermanos Mau y Ricky?
– “La Sole” es nuestra, es de Santa Fe, de un pueblo cercano. La elegimos por ese motivo, de hecho queríamos que se dé vuelta. Ricardo Montaner también sobre todo por la experiencia y la trayectoria, pero la realidad es que los cuatro (la jurado restante es Lali Espósito) son muy buenos cantantes y cualquiera que se diera vuelta para nosotros ya era un golazo. Cuando estaba llegando el final del tema nos miramos con Agustín y de repente sentimos el ruido de los pulsadores y vimos que dos sillas habían girado. Fue muy emocionante, no lo podíamos creer. Hacía varios años que no se emitía una nueva temporada de La Voz y la gente la estaba esperando con mucha ansiedad.
– ¿Cómo tomaste la broma del jurado cuando dijeron que eras el hermano de Marley?
-La tomé muy bien, de esas bromas que te hacen pasar un lindo momento y fue una manera de descontracturar un poco los nervios que sentía. Creo que Montaner lo buscó por ese lado. Igualmente la producción también me cargaba con Marley antes de todo esto. Y después salimos en varios medios de alcance nacional como el diario La Nación, la revista Pronto y el programa Bendita que conduce Beto Casella, entre otros.
– ¿Qué repercusiones hubo después de la presentación en Telefe?
-La gente nos apoyó en todo momento, desde que se hizo viral la imagen que publicamos el día de nuestra presentación en el programa, compartiéndola a través de las redes sociales y en los estados de WhatsApp. Es una experiencia realmente hermosa. Estamos muy contentos y orgullosos por el aguante que nos hicieron. Nuestras familias estaban felices, sentimos una satisfacción muy linda y es algo que nos quedará guardado en el corazón.
– Imagino que es una experiencia inolvidable…
– Totalmente. Es un programa muy grande y con mucha audiencia. Uno no pretende ser famoso, en todo caso eso llegaría solo. Pienso que, primero, tenemos que disfrutar de las experiencias que nos toca vivir y la verdad que no todos los días se nos da la oportunidad de estar ahí. Siempre decimos con Agustín que somos unos afortunados de haber quedado entre tanta gente del país porque han quedado muchos talentos afuera, muy buenas voces. Hace muchos años que la venimos remando y haciendo lo que nos gusta, por eso creo que La Voz Argentina es el programa que nos faltaba para poder concretar el sueño, así que estamos más que contentos.
– ¿Cuándo volveremos a verlos brillar en La Voz?
-Ahora se están armando los equipos, son 26 participantes en cada uno. Luego empezaremos con las batallas donde los cantantes competimos dentro del mismo equipo y ahí van a quedar los mejores. Después vendrán las instancias de nocaut, playoffs, shows en vivo, semifinal y final. Ese es el formato del programa.
– Se nota que arriba del escenario se complementan muy bien…
-Lo disfrutamos mucho, más cuando hacemos música bailable porque la gente se divierte. También cantamos melódico, folclore, tango, cumbia, cuarteto, de todo un poco. Tenemos un repertorio bastante amplio. Cuando nos subimos a un escenario ya nos cambia el panorama por completo, sentimos una felicidad inmensa porque nos conocemos tanto que cada uno sabe qué parte tiene que cantar y cómo lo tiene que hacer. Solemos ensayar en los tiempos libres, pero como venimos trabajando juntos desde hace muchos años ya estamos acostumbrados.
– ¿De qué manera sobrellevan el impacto de la pandemia en la actividad artística?
– Al principio estuvimos en cuarentena estricta. Después pudimos retomar durante un mes solamente, hicimos algunos shows y no pudimos cantar más porque la situación sanitaria obligó a cerrar de vuelta algunas actividades de acuerdo a las restricciones establecidas por los decretos nacionales y provinciales. Así que nos manejamos haciendo videos en las redes sociales para mostrar la música, transmitiendo en vivo en Instagram y Facebook, que son las plataformas que más consume la gente. En ese sentido todos los artistas estamos en la misma situación.
– Pese al difícil contexto, ¿pudieron seguir con los ensayos?
– A partir de las aperturas que se fueron dando empezamos a juntarnos más seguido para ensayar, pero nunca perdimos el contacto. Siempre buscamos canciones nuevas para hacer. Y ahora es como arrancar de cero de nuevo, sabemos que nos va a costar volver a cantar en lugares. Esta situación nos frena un montón porque tras la participación en el programa nos hubiese encantado trabajar de lleno en esto, pero no se puede hacer nada. De todas formas, seguimos subiendo material a nuestras redes y aprovechamos para decirle a la gente que nos pueden seguir en Instagram buscándonos como @gonzaloyagustinduo, @gonzaloboelaert y @agustinvargetto.
– ¿Qué mensaje final le darías al público?
– De agradecimiento fundamentalmente a la gente de La Vanguardia, de Coronel Bogado y de toda la zona por el aguante que nos vienen haciendo desde un primer momento. Gracias también a toda la gente que hace El Medio Mundo, que facilita el medio de comunicación para que los vecinos estén enterados de todas las noticias de la región y alrededores. La idea es pasarla bien, y si nos toca perder y pegar la vuelta sepan que vamos a estar muy felices igual.